Todos nos comparamos
Y dependiendo de con quién/qué nos comparemos
Vamos a sentirnos de una manera u otra
Imagina que tu pasado sábado fue un gran día
Y el miércoles fue un mal día
Hoy estás en medio de un día «más o menos»
Si te comparas con el sábado, te sientes mal… porque estás peor
Pero si te comparas con el miércoles, te sientes bien… porque estás mejor
Más sin embargo el día de hoy es el mismo
Lo único que cambió fue la comparación
A veces me comparo con personas que venden mucho más que yo
O que tienen más estudiantes que yo
Y me siento mal… porque estoy «peor» que ellos
En esos momentos me recuerdo el concepto de «comparación estratégica»
Y me comparo con una persona que no puede caminar y está en silla de ruedas
Con alguien que vive en la calle
O con Jean Dominique Bauby, un francés que a sus 42 años sufrió una embolia cerebral que lo dejo paralítico… solo podia mover su ojo izquierdo
¡Y en estas condiciones escribió un libro entero!
¡JOLINES!… UN LIBRO ENTERO
Dietándolo con su párpado izquierdo
En ese instante me doy cuenta que estoy muy bien
Que todo lo que me quejo es una gran estupidez
Siento gratitud por estar en mis zapatos y por ser quien soy
Por eso sé estratégico al compararte
Sencillo pero cierto, gracias Julian
Hola Juli.
Confieso que soy de las que se compara mucho.
Aunque llevo meditando hace un mes y eso ha frenado un poco mis pensamientos no tan positivos, entre ellos, vivir comparándome.
Si a alguien le sirve para este problema tan común entre los que queremos emprender online. 🙂
Saludos.
Cambiar la perspectiva de envidia por admiración también ayuda.
Muchas gracias por la labor que haces.